El actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y múltiples dirigentes del Partido Popular estaban totalmente enterados de las actividades ilegales de los extesoreros Luis Bárcenas y Álvaro Lapuerta para financiar irregularmente al partido.
Eso asegura él mismo en una conversación de cuatro horas que mantuvo con el director del diario El Mundo días antes de ingresar en prisión, y que este domingo publica el rotativo.
El extesorero realiza un relato pormenorizado de cómo se financiaba ilegalmente el PP, a través de comisiones cobradas por empresarios y constructores y que eran anotadas en unos papeles B (los llamados 'papeles de Bárcenas'), para posteriormente corresponder con favores por parte de las Administraciones Públicas gobernadas por el partido.
Las comisiones eran destinadas a financiar los gastos de las campañas electorales sorteando la vigilancia del Tribunal de Cuentas, y asimismo, pagar sobresueltos a presidente, vicepresidente y secretarios del PP.
Los altos cargos del partido eran conocedores de esta situación, y, según el relato de Bárcenas, el propio Lapuerta, entonces tesorero, era el encargado de ir con los sobres a los ministerios y sedes correspondientes para entregarlos.
El exsenador asegura que fue traicionado por el abogado Jorge Trías, a quien entregó esta contabilidad secreta para que analizara su importancia, y que finalmente acabó fotocopiada y en la redacción de El País. Bárcenas relata que Trías calificó esas anotaciones de "bomba".
El conocimiento de Rajoy
El extesorero asegura que, su primer desmentido de la veracidad de esa contabilidad B se debió a su "lealtad" al PP, y que llegó a fingir una letra falsa ante los peritos para dificultar que le fuese atribuida la autoría de los asientos contables manuscritos.
Tras la publicación de los papeles, Rajoy pidió a Bárcenas a través de un sms que se mantuviera "tranquilo y sereno". A partir de ahí, su comunicación se realizó a través de los exministros 'populares' Michavila y Acebes.
La "lealtad" del extesorero al PP comenzó a agotarse tras ser rastreado su dinero en Suiza. Así, Bárcenas da detalles de una reunión que se produjo meses antes, en la sede del PP, con su esposa, Rajoy y Javier Arenas. Bárcenas se quejaba de la animadversión que le tenía la secretaria general, María Dolores de Cospedal, y le puso como ejemplo a Rajoy una comisión cobrada de un empresario de Castilla-La Mancha que ascendía a 200.000 euros a cambio de dar el visto bueno a una contrata en Toledo.
Para probarlo, Bárcenas mostró a Rajoy las anotaciones que daban fe de esto, y recuerda que el actual presidente se llevó las manos a la cabeza: "¡Por Dios, Luis, cómo puedes tener estos papeles!".
FUENTE: EL ECONOMISTA.