El oro lleva cuatro días de caídas en los mercados de materias primas por los temores de los inversores sobre la recesión económica y tras haberse inflado su precio en agosto por las turbulencias bursátiles y la aversión al riesgo.
En concreto, el precio del oro
ha caído un 16% desde los máximos históricos que marcó el pasado 22 de agosto -cuando superó los 1.880 dólares por onza- y se paga a 1.580 dólares.
El viernes -tras el anuncio de la 'operación twist' de la Fed- el oro se desplomó un 5,8%, su mayor caída porcentual en un solo día desde marzo de 2008. Los inversores, que suelen ver este metal precioso como un valor refugio, se han decantado en las últimas jornadas por buscar liquidez tras las caídas generalizadas en las bolsas.
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cotizalia